martes, 30 de diciembre de 2008

NOCHEVIEJANUEVA Y EL TAMAÑO EN EL PUEBLO






      Hoy es el penúltimo día de este año. Los años no acaban el 31 de diciembre, los años acaban cuando uno quiere que acaben, al menos en mi caso. Todos los años oficiales (del 1 de Enero al 31 de diciembre) tiene a la fuerza algo diferente al anterior. Este año para mí ha sido un año insólito (por denominarlo de alguna manera) y especialmente los últimos meses. Jamas había sentido las sensaciones -buenas y malas- que he percibido en estos últimos días del año oficial.       Mi vida personal se ha resentido por supuesto, pero ha sido sobretodo mi vida profesional la que más se ha descalabrado, y lo más curioso de todo es que a veces me ha gustado que sea así. Aunque también he maldecido el abuso, el  error, la sinrazón y el atropello del que he sido víctima. 
   Si tuviera que resumir muy muy mucho a que me he dedicado sobretodo estos últimos meses de vaca-acciones diría que a la mente y al cuerpo. Y he disfrutado mucho. Por la mañana el intelecto y por la noche lo otro. 
   Ayer de nuevo fui a ese gran almacén que vende salud o curación, y a veces muerte. Es un gran centro comercial y estatal lleno de dolor y de esperanza. Y como todo gran centro comercial que se precie lleno también de escaleras y ascensores. Nunca me gustaron los hospitales -ni los centros comerciales- y creo que si algún día ingreso ingresaré poco. 
  Mi tía/presidenta de una de mis patrias hoy se va a su reino, no está bien del todo (los hospitales nunca curan bien del todo), pero dicen que mentalmente estará en su casa mejor ¡pues claro!. Allí presencie una espantosa discusión de uno de sus hijos (infame y radical) con otra de sus hijas (hermosa y virtuosa). La familia a veces es un campo de batalla con refugiados incluidos. Siempre amé y admiré a esa prima, en la infancia fuimos los dos patriotas de la misma patria. Ahora la admiro también aunque yo no seamos ciudadanos de la misma patria.  
   Y allí en el centro comercial-hospital estaba también otra familia de alguien que me huye y me busca, me reclama y me espanta, me atrae y me repele... y a pesar de todo, y no sé aún muy bien porqué, le quiero y creo que siempre le voy a querer. Es raro, es por eso. 
   Y mañana íbamos a ver el primer amanecer del año (oficial) en el mar. Pero ya no van... Yo no lo sé. Me encantan estas situaciones y especialmente cuando todos celebran ese final de año oficial.  El año pasado vino alguien de Barcelona, que apenas conocía y pasamos las 12 de diciembre también en el mar de aquí al lado. El anterior fue fantástico lo pasé con ese que amo y no amo quiero y no quiero, en un casino lleno de chinos, y genial y distinto, es decir soberbio.  Recuerdo otro año que en vez comer uvas comí sexo. ¡Viva esas nocheviejas!.
   Hace muchos años me fui al pueblo a celebrar el ritual del año viejonuevo. La fiesta era en un cobertizo en mitad del campo, rodeados de ovejas, vacas, burros, algún caballo, gallinas y creo que también había cerdos (animales).  Y luego gente del pueblo, amigos de mi patria que no veía hace tiempo. La cosa fue bien. Pero recuerdo algo que pudo haber terminado mal. Cuando ya todos estábamos muy alegres gracias a esas medicinas con alcohol que todo lo curan (aunque luego lo vuelvan a enfermar). A alguien se le ocurrió que podríamos jugar a las prendas, un viejo juego pseudo erótico juvenil que consiste en ir quitándose prendas (ropa) según se vaya perdiendo. Yo tenía un poco de recelo a pesar de tener ya algún litro de alcohol encima, los demás probablemente tenía el doble, pero yo para estas cosas del sexo soy muy egoísta, es decir cómo mucho dos.  Y allí estábamos, creo, 10 personas. 
   La que más interés tenía en que jugáramos era la hija del pastor que cuidaba los animales que allí habían. Era una chica algo gordita, estaba trabajando en Madrid y todo el mundo comentaba el cambio que había dado desde que se fue del pueblo a la ciudad. Es lo que tiene. 
  Comenzamos el juego y al principio todo normal. Cada uno/a se iba desprendiendo de correspondiente prenda y aunque fuera hacía frío, dentro había una buena temperatura gracias a la enorme hoguera que habían preparado. Hubo un momento en que una de las chicas (del pueblo, este dato es importante) se tuvo que quitar el sujetatetas... Y se lo quitó. Después otro se quedó en calzoncillos, otra en bragas, yo también (aunque me costó, era el único que no vivía en el pueblo además de la hija el pastor). 
   Y finalmente alguien tuvo que quitarse la prenda más intima. En este punto del relato de los hecho tengo que aclarar que dos de los participantes eran casi pareja, estaban tonteando como se dice en el pueblo. 
   Al final todos menos uno estábamos en pelotas (casi hora y media después de haber comenzado el juego). Pero el uno que aún permanecía en slip, perdió y tuvo que quitárselo. Y aquí llegó el lío (por llamarlo de alguna forma). 
  Lo resumo para no hacerlo más largo y porque tengo prisa: la tía que estaba medio tonteando con el tío y estaban apunto de hacerse novios formales (esto en los pueblos lleva su tiempo y su ceremonia) había hecho el amor ya con él. O eso creía. Porque resulta que al verle la polla a su medio novio va y le pregunta: ¿pero tú siempre has tenido el pito así...de pequeño?. El novio y todos los que allí estábamos nos quedamos de aquella manera al oír la preguntita. "Pues claro" respondió tímido el novio. Entonces la chica con cara algo descompuesta, se dirigió a otro de los tíos que allí estaban, y que por cierto tenía una polla bien grande, y le dijo: "Por favor ¿puedes salir un momento fuera conmigo que tengo que preguntarte algo en privado?". Todos nos miramos algo confundidos. Se pusieron algo de ropa y salieron.  Un rato después volvieron y no comentaron nada, y la fiesta continuo más o menos normal. 
  Al día siguiente la chica y medio novia, me contó lo que había pasado (yo era el único que no vivía en el pueblo y eso le daba más confianza para contármelo). La historia fue la siguiente. Hace unos meses, en verano,  en la boda de unos familiares casi todos se habían emborrachado. Y la chica víctima del alcohol y la calentura no se puedo resistir y folló con su prometido. O eso creyó ella. Porque lo que más recuerda de aquella noche de amor era el tamaño del miembro viril del que pensaba que era su novio. Pero el juego de las prendas le aclaró que en realidad no había sido así, y que con quien había follado era en verdad era con el amigo de su novio. 
     La vida en los pueblos es una película

domingo, 28 de diciembre de 2008

soy bipatrial, ¿estoy de vacaciones? los chinos






     8 días sin venir, 8 días sin recordar, 8 días sin volver, 8 días sin contar, 8 días sin disfrutar ¿?... A ver si va a resultar en realidad que han sido los 8 días de vacaciones que me corresponden de mis vaca-acciones. ¿Será eso?. Es decir, según el estatuto de los vaca-accioneros tengo derecho a no bloggear durante 8 días en navidad. Pues va a ser eso. Es que sino no doy crédito ¿8 días sin aparecer por aquí?. Y qué rápido han pasado. Prácticamente ni me he enterado. 
    Me va a costar volver a todo lo demás, estoy seguro. 
    La nochepena muy bien, la familia mejor y menudo flan me hizo mi tía/presidenta de esta mi patria. Es la hostia. Yo en navidad y sobretodo en nochepena siempre vuelvo a una de mis patrias. Tengo 2. una patria en cada pueblo, soy bipatrial. Y siempre está igual, mis patriotas no cambian y me gusta que no cambien. Pero en la otra patria no ha habido tanta alegría. Mi otra tía/presidenta de la otra patria a lo que no voy desde hace más de dos años, pasó la nochepena en el hospital. Y sentí amor al verla, y me sentí parte de ella. Su vida es dura, tanto como su fe. 
  Y esa noche en la que se establece ese estado de sitio en que todos deben cenar felizmente con todos por ley; es la noche más jodida para aquellos que no pueden cumplir la ley. Además de mi tía/presidenta de mi otra patria también incumplió la ley el muchacho bueno de las carreteras y su padre. Y a los guardianes de esa ley les importa un pimiento que algunos no puedan cumplir la ley de la cena feliz, no les detienen ni les meten en la cárcel, sólo les recuerdan continuamente  y machaconamente que hay gente felizmente cenando y que ellos no podrán, ¡qué se jodan!. Odio los estados de sito (Israel está machacando de nuevo Gaza y ya van 200 machacados en un solo día) .
     Y en medio, o sea antes, conozco a la ternura, otra ternura, y la abrazo. Y me gusta. Y le gusta Anthony y el popranea. Y luego paso frío, joder eso es lo peor. Estos días he tomado casi más pastillas que turrones, más. Qué dolor de espalda da a veces la ternura. 
    Y en mis correspondientes días de vacaciones de las vaca-acciones ayer viaje a Roma (la roma de aquí al lado, apenas media hora). He ido a cumplir con el rito de la visita a mi confesor. Nos hemos confesado, he contado mis pecados, me ha puesto la penitencia y hay muchas dudas/esperanzas por el nuevo régimen. Y luego nos hemos dado un homenaje con cocido de luxe en el mejor restaurante que había hoy en Roma. Servicio excelente, trato elegante  y cariño asegurado: ¡viva la familia tradicional!. 
   Y luego he ido con mi confesor y su confesor, los 3, a la patria de su confesor a escuchar cantar a otra familia (es tiempo de familias). La matriarca ha cantado para esa patria, fría,  pero ella ha estado caliente y me ha calentado a mí. Hace meses en vez de aplaudirla en uno de sus conciertos le regalé una canción, y hoy la ha estrenado, y me ha invitado a subir con ella para descubrir sus 3 elegancias: vestido, voz y corazón. Hemos pasado por el escenario hasta el apuntador, vaya diva, mira que  permitir que otros ocupen su foco.
   Hace dos días descubrí a chinos que tocan pies en vez de arroz. Y me los tocaron muy bien. Necesitaba un  masaje para espantarme el dolor de espalda producido por la ternura. Y los chinos casi lo espantaron. La  reflexología o digitopuntura es una medicina tradicional que estimula la energía mediante los pies. Cada punto concreto del pie se corresponde con un órgano del cuerpo.  El dedo gordo  a la cabeza, el talón a las rodillas, donde se forman los callos a los oídos... y así toda la planta. Eso parece la planta de oportunidades del corteinglés. Toda la planta del pie es para los chinos una gran pantalla en la que ven lo chungo o no que tienes por ejemplo el estomago, la columna o los huevos mismamente.           
      El maestro que inspeccionó mi planta-pantalla se mostró muy simpático.  Le manifesté mi sorpresa y admiración por su dominio de mis pies y en agradecimiento  se extendió aún más en sus conocimientos. 
  Resulta que hay una parte de la planta del pie, justo debajo del puente tirando hacia los talones, donde hay un puntito (canalla) que se corresponde con los testículos. Él me lo tocó y me sonrió, y por sus gestos faciales  (ni una palabra de español) deduje que me estaba tocando los huevos, no literalmente, pero si reflexológicamente. Qué gracioso pensé. Y entonces se me ocurrió la mayor tontería que se me pudo haber ocurrido, sin acordarme que somos culturas muy muy diferentes.  Mientras me tocaba el puntito de los testículos, le pregunté con gestos si no había un puntito concreto para saber como tenía....... la polla. No dije polla con gestos, más bien creo que gesticulé "pene".  Aunque para que pareciese más científico y no hubiera dudas intenté darle a entender "organo genital masculino" o "aparato reproductor masculino". Pero pensé que "pene" era más corto y también podría considerarse una palabra científica. Y así lo hice. Y me entendió perfectamente.  E ipso facto desapareció sin decir ni mú. Pero al momento se presentó una joven china con una bata blanca y con la boca tapada con una mascarilla. Muy correcta, me saludó y me preguntó "¿pene?"; con la misma artificialidad que cualquier chino te pregunta en restaurante chino "¿chopsui de calne o pescado?".  Yo intenté decirle que era sólo una curiosidad y que mi interés sólo era medicinal, quería simplemente saber su estado de salud al igual que el del estomago o el riñón.  Ella volvió a preguntar "¿pene?".  Y yo pues dije sí. 
      Entonces tomó mi pie izquierdo y comenzó a frotar debajo del dedo meñique con una mano y con la otra la parte lateral izquierda del talón. Todo ello en un movimiento suave pero perfectamente acompasado.  Y joder. Vaya con la china, el masaje, el pie, la reflexología, el dedo meñique  y mi estúpida curiosidad. Se me empezó poner dura sin poder evitarlo... ¡Qué vergüenza dios mío! Me estaba empalmando a ritmo del masaje de la china en la planta de mi pie izquierdo. No sabía que decir ni que hacer y la china por supuesto ni me miraba a mí, ni a mi abultado pene.  Cuando ya lo tenía... a tope, va la china mira de reojo mi bulto,  y me dobla de repente y con todas sus fuerzas el dedo meñique hacia atrás causándome un dolor impresionante. Pero al momento me dejó de doler y a la vez se me bajó to. 
      ¡Cómo son estos chinos y lo que tenemos que aprender todavía de ellos!.  
   Luego llegó el maestro se fue la china y me quedó como nuevo. Y mañana vuelvo otra vez.  Y ahora le pienso preguntar por el puntito de atrás

sábado, 20 de diciembre de 2008

LA RESACA DE LA SEDUCCIÓN





      La resaca de la seducción puede ser tan jodidamente asquerosa, o más, cómo la resaca del alcohol. Es mucho peor, la de del alcohol al menos te queda sin ganas de nada sólo de estar tirado y esperando que llegue la hora de dormir para resucitar otra vez. Sin embargo con la otra (supuestamente) estás lúcido y sin dolores de cabezas y otras extremidades. Y por eso es peor, la lucidez crea estados imposibles, no te impide pensar y desear, y repetir y empezar.¿Y to pa qué?   Estoy harto de tantas resacas y de tantos molinos. Es inútil que busque porque aunque lo encuentre no lo voy a reconocer y además ¿Qué coño estoy buscando?. 
    El día de ayer y el de antes de ayer han sido días sombríos de desequilibrios, arrebatos y hasta delirios. Tan desequilibrados que puede que ni incluso hayan sido así y sólo me lo hayan parecido. 
   En el primero de estos dos días, hasta descargué agua envenenada de rabia y nosequé  en la calle, en mitad de la calle, sobre una pared cerca de la Plaza de Italia. Por la mañana placer y belleza, corporal y visual, con descarga también, para no variar. Luego se anuncio día de gloria para Roma y apenas lo sentí. Y después tarde de angustia incontrolada (fantasmas incluidos) y si lo sentí, y lo regué, y de ahí vinieron las lagrimas. Y con ellas di por finalizado el error de roma y la traición, como luego me recordó el de la calle caleros en un mensaje: "estás rodeado de traidores".  Y ya en mi casa me reconcilié con mi puntual desequilibrio, arrebato y delirio. Y me rasqué los huevos con ello. 
   Y de pronto llega el segundo día bien cargadito, y después de la tempestad llegó un temporal calmado, apasionado y acariciado. Y de nuevo la lección sempiterna: paciencia. Y llegó. No había nadie fuera ni dentro  solo nosotros dos. Tan perfecto que no parecía mi realidad y tan completo que parecía ficción. Y bebí tanta seducción, con hielo y sin hielo, que así tengo hoy la resaca que tengo. 
   En las resacas de ginebra no te preguntas nada , en estas sí. Y eso es lo peor. Si pudiera tomarme una pastilla para olvidarme algunos días felices seguro que sería más feliz. Si pudiera vacunarme contra las preguntas sin respuestas seguro que no me dolerían tanto mis propias y asquerosas "inquieguridades". Podría matar a alguien a sangre fría sin  que me temblase el pulso pero estoy seguro que sería incapaz de elegir a ese alguien. 
   Y al final no vino luego a dormir pero se quedó algo aquí para poder volver. ¿No es eso una gran putada, joder?. No.
   En cierta ocasión y también en otra (puta) navidad, prometí a alguien regalarle el primer amanecer del año y se lo creyó. Ya ves, valiente cursilada de guión fácil, yo que voy de anticursi.  Y vino desde lejos a por su regalo. Me pasé todo el día como un buen caballero, envolviendo y adornando el regalo prometido. Y resulta que de nuevo resultó mejor el envoltorio y el adorno que el propio regalo. El primer amanecer del año..... resultó ser en realidad el trailer de la (mi)  película del año. 
 
    ¿No te han entrado nunca ganas de preguntarle a un desconocido en la calle qué que le pasa? A mí muchas veces. La situación siempre es la misma. Estoy sentado en un banco en el parque y alguien está, o pasa, cerca de mi. Me mira y entiendo que me está diciendo: ¡si tú supieras lo que me pasa! o ¡si te pudiera contar lo que me pasa!.  Y entonces yo le miro diciéndole: ¿Qué te pasa? o ¡creo que se lo que te pasa!.  
      Hoy cuando he ido a pasear con el perro había muy poca gente, eran las 3 de la tarde, mi hora del parque favorita. Estábamos sólo tres:  un padre con sus dos hijos pequeños que hoy tocaba sacarlos y estaba hasta la polla de esta nueva y absurda situación de tener que sacar a los niños por obligación el día que el juez ha marcado y no cuando a él le dé la gana. También estaba sentada una señora que no quería quedarse sola y cada vez que alguno de nosotros dos (el padre cabreado o yo) cambiamos de lugar obligados por sus hijos o por mi perro, ella, la señora que no quería quedarse sola, se cambiaba también lugar y se ponía junto a nosotros. Y al final consiguió juntarnos a todos, a los tres, más los dos niños pequeños y mi perro. Cuando me di cuenta estaba ella en medio y a ambos lados nosotros. En una parte el padre en los columpios con sus hijos y en la otra yo leyendo y con el perro jugando cerca.  
Y ella en medio feliz mirándonos porque éramos la familia que en su casa no podía tener. 
  
    
   

jueves, 18 de diciembre de 2008

Jueves diciembre 18 HOY NI SOY NI VOY NI HAY




Hoy ni soy ni voy ni hay.

miércoles, 17 de diciembre de 2008

Deudas, mensajes y dudas.






      Cuando uno se levanta a la hora que le da la gana y lo hace cabreado, algo no funciona bien. Uno de los mayores placeres de mi actual estado vaca-accional es acostarme cuando quiero y levantarme cuando me da la real gana. Pero llevo varios días con la puta historia de una absurda deuda que no pagan a los artibreros,  por un ajeno problema a nosotros. Y me está obsesionando tanto, porque hay ¿o había? amistad por medio. Y hasta me impide dormir y despertar a pierna suelta y sin despertador. Debería agobiarme por otras cosas y aquí estoy cabreado por eso.
      Todos me tratan bien, ayer tenía mal día con la gripe, y me llamaron y se interesaron varios por mí, no por la gripe. Y encima a última hora y sin querer me fui a la cama acompañado, pero sin ganas y deseando acabar. Tengo que administrarme más y mejor  y cuando estoy sin ganas, lo estoy para  para todo, incluido el sexo. Hoy he sabido decir que no, aunque me ha costado. 
      He recibido, estoy recibiendo desde hace días, mensajes directos, esperanzadores, contradictorios, confusos, absurdos..de todo tipo; sobre mi antiguo estado. Lo más increíble de todo es que parece que no hay nadie que se entristezca por una marcha anunciada y muy deseada. No acierto a entender como alguien se puede confundir tanto. Se pueden cometer errores pero no ser un continuo error. No lo concibo en lo público. Y en lo privado se llama cacique. Cuanto despropósito con medios públicos, es lo peor de la política. 
     Esta mañana no he podido trabajar en casa, estaba muy mal, lo he intentado pero me ha sido imposible, era como una losa mi casa, mi ordenador, mi mesa y hasta mi sillón. Y el perro se ha alegrado de ello. Él sabe que cuando no estoy bien y no sale nada, nos vamos a la calle, al campo, al parque o a cualquier otro sitio sin techo. Hacía varios días además que no salíamos los dos juntos  y hoy tocaba indirectamente. Hacía frío pero con sol, que es menos. Y en el parque sólo había viejos y estudiantes de secundaria. En el banco que me senté habían escrito lo siguiente: "este banco está ocupado todos los días de 1 a 2 por Fran y Bea". Eran las 12:50 faltaba poco para la 1. Sentí curiosidad por saber si "Fran y Bea" vendrían a ocupar su hora diaria en el banco. Y por supuesto si así fuera yo les cedería gustoso el sitio. Pero no. No vinieron y en su lugar se sentó a mi lado un anciano elegante vestido de negro y con un bastón, también elegante. El perro, como siempre, fue el primero en saludarle. A mí no me hizo mucha gracia que se sentara allí junto a mí, me gusta estar sólo cuando quiero estar sólo. Y hoy precisamente no tenía muchas ganas de relacionarme. Después de contestarle con un seco, obligado e ininteligible buenosdías, el anciano compañero de asiento parecía tener ganas de comunicación,  yo ninguna. La excusa perfecta como siempre: el perrito. 
     A pesar de sentirme incomodo no he  perdido la educación y he mantenido las formas. En un momento dado el viejo acompañante del parque me pregunta si he estado alguna vez en la Montaña, un lugar religioso que se divisa desde donde estamos, está a lo lejos y allí  hay un santuario que guarda la imagen de la Virgen de la Montaña, patrona de esta ciudad.  Por supuesto que he ido muchas veces, no tanto por devoción sino más bien por excursión y paseos. Se trata de un lugar con unas vistas fantásticas. Mi acompañante de banco me pregunta ahora si he ido a ver a la Virgen. No me gusta la pregunta, parece más de un beato militante que de un simple paseante de parque con ganas de conversación. Le contesto que alguna vez he entrado en la capilla (con mi madre, por mi madre) pero que generalmente no voy a eso. Ante mi respuesta su pregunta es: ¿eres creyente?. Esto me gusta aún menos que lo anterior. No le contesto a su indiscreta curiosidad y sólo le digo que esas son cuestiones personales. Y entonces por fin descubro el porqué de todo este preámbulo. Resulta que el elegante viejo, de negro y con bastón que está sentado a mi lado es  cura, es un sacerdote católico.  Eso al menos me ha dicho. Para a continuación añadir algo sorprendente e incluso inaudito: me cuenta sin venir a cuento que ha perdido la fe. Ya no cree en la Virgen que está allá arriba en la montaña, me dice señalándola.
       Todo esto que aquí cuanto en dos o tres simples  frases, él lo ha hecho en muchas más y en un lenguaje muy propio de los curas, pausado y con citas. Lógicamente estoy algo perplejo ante lo que me está diciendo, e incluso llego a pensar que puede tratarse de un loco. Los parques y en general los lugares abiertos son espacios muy propios para locos, enamorados, solitarios y tipos en mi situación de hoy, sin ganas de hablar con nadie. Pero nunca pensé que también eran para curas viejos que han perdido la fe. Un parque es tan grande y abierto que cabe de todo. 
    Las palabras del cura y sobretodo lo que significan han conseguido avivar mi interés en él; no es muy habitual encontrar por ahí curas que van diciendo al primero que se encuentran que han perdido la fe. Por eso me he atrevido a preguntarle el motivo de esa pérdida de algo tan primordial en la vida de un sacerdote como es la fe. Advirtiéndole eso sí y en todo momento que respetaba su decisión y que no tenía ninguna obligación de contestarme si así lo deseaba (aunque estaba ansioso por saberlo). El hombre de negro no lo ha dudado ni un momento y ante mi pregunta su respuesta ha sido otra pregunta (algo muy propio de curas y gallegos) : ¿Tú crees que tu perro te entiende cuando le hablas?. Yo le he contestado lo que ya he dicho en otras ocasiones que ha salido este tema: creo que hay ciertas palabras que de tanto repetirlas él ya sabe lo que significan; por ejemplo siéntate, o agáchate, o busca. Y por eso actúa como actúa. Entonces el cura que ya ha perdido la fe me dice casi de forma ceremonial: Pues yo llevo repitiendo las mismas palabras toda la vida y ahora me he dado cuenta de que nadie ahí arriba las ha escuchado y por tanto tampoco han actuado.
   Joder, pienso, debe ser duro para un cura darse cuenta de eso y más siendo ya viejo, anda que no habrá dicho misas este hombre.. Y después de pensarlo y dudarlo, decido por fin hacerle la pregunta lógica: ¿Y ahora que va a hacer?. El cura me mira, luego mira a mi perro y dice: Estoy pensando en adoptar un perro. 

lunes, 15 de diciembre de 2008

ME FALTAN HORAS Y NO TENGO HORARIOS






      Tengo todo el tiempo del mundo y sin embargo no tengo tiempo. Me faltan horas y sin embargo no tengo horarios. No poseo obligaciones y sin embargo estoy ocupado. Miedo me da cuando horarios, obligaciones y tiempos haya que cumplir. ¿Me estoy acostumbrando mal o es el hedonismo disfrazado?. 
      Hace días que no pasaba por aquí y tengo que pasar diariamente. Los rodajes llevan tiempo, las inauguraciones ocupan espacios, la creación absorbe horas y la diversión libera neuronas. Eso es.
     En uno de los últimos actos  he percibido mensajes de muchas partes con inesperadas sorpresas incluidas. En una de mis últimas comidas he recogido señales confusas de poder y pasado.  
      El viernes hice horas extras desde por la mañana, y sin parar, hasta la madrugada,  y bien de madrugada y sin parar.  Mi vieja mater partenaire llegó de lejos y no le salió bien la jugada del todo, me quedé mal aunque al final lo pude arreglar y me quedé bien. Contento pues. 
     La galerista es clásica clásica pero  también contemporánea, y abrió su nueva doble casa. Arriba vive, abajo muestra y vende. En su exitosa puesta en escena no faltamos  y de todos recibí una señal. Al final llegó la actuación del pintor bailarín con capote de grana y oro. Me entretuvo oye.  Y al día siguiente, primero enfado porque el de la verruga no vino y luego todo el día tirado y sin ganas de nada. Día 0.
     Ayer murió un admirador/admirado y serigrafiado que siempre ha/he colaborado. Me dolió hasta dentro y le dediqué 1 o 2 poemas de poetas populares en los que él creía, en dios no. Eli-grafía me recordaba a Fernando editor y por eso leí el mismo poema de Antonio Machado que a ambos debía gustar: "Hacedme un duelo de labores y esperanzas. Sed buenos y no más, sed lo que he sido entre vosotros, alma. Vivid, la vida sigue, los muertos mueren y las sombras pasan; lleva quien deja y vive el que ha vivido". Y ella (valiente) se queda sin él y llora: él no quería irse. Cuando hace unos días fui a verle antes de morir, ella preguntaba sin entender la razón por qué los que quieren quedarse no se quedan y los que quieren irse se van provocando su marcha.  Esta noche he tenido pesadillas que más bien parecían pesadollas, y esta tarde hemos terminado la primera parte del cine cortito. 
       Un día hace algunos años fui a un concierto a Madrid de una banda inglesa que por entonces nos subyugaba, hoy no. Allí conocí a alguien que a priori no me interesaba nada, pero insistió y lo consiguió. Son los frutos de la paciencia que yo no suelo cultivar. En aquel viaje musical me acompañaba el que ayer murió y entonces  me aconsejó que hablara por lo menos. Al terminar el concierto me di cuenta que prejuzgar no siempre funciona aunque con los años se aprende a hacerlo bien. Nos fuimos juntos de copas por la gran ciudad y al amanecer nos recogió en su casa. Tal y como deseaba hicimos el desamor bien hecho y la cama bien deshecha. Al despertarme horas después  había alguien diferente a mi lado y nunca supe realmente con quien había intentado follar. 
       Al regresar de Madrid, durante el viaje alguien comentó que quien nos había dado cuartel en su casa había estado ingresado en una clínica para locos debido a un extraño comportamiento consistente en creerse dos personas diferentes. 

miércoles, 10 de diciembre de 2008

Teatro, ruralmodern-bar, sexo y butacas





    Mi apertura en canal en este espacio sin alambres, es una rehabilitación y como tal no puedo pasarme varios días sin hacerla; aún no está el hueso formado del todo. Llevo dos días viendo teatro de aquí (por eso). El teatro es el lugar más maravilloso del mundo si la obra es buena y el más horrible si lo obra es mala (Marcos Ordóñez) . He encontrado a los obreros del teatro, a los oligarcas (nunca cambian, ni de cara siquiera) y a los administradores . Amo a muchos de los primeros y a estos últimos porque hacen de administradores pero no lo son.  Yo también he sido, confieso. Y por eso también me aman. No puedo evitar tender y mantener vínculos con aquellos  de quehaceres cómplices y quereres compartidos. El teatro es de todas las artes el más sensitivo y el sentimentalmente  más pornográfico.  Por eso me gusta. Me he pasado mucho tiempo viviendo en teatro como el que vive en pecado y lo disfruta. El teatro puede ser profundamente frívolo hasta cuotas de placer sadomaso y el público ni se entera. Qué se joda. ¡Desnúdate tú!.
   ¿Obsesivo viene de sexo? Y de asedio....al sexo. Me gustaría conocer de antemano mi calendario fértil, así podría organizarme mejor.  Esta semana y la anterior la estoy disfrutando pero quiero cansarme ya y no puedo. Conozco a alguien que primero folla y luego saluda, y yo creo que debe ser al revés. ¿O no?.  No debería hablar tanto de eso/sexo, pero estoy en rehabilitación y me ha dicho el doctor que tengo que moverlo todo, aunque me duela. Y en vac-acciones no hay hora de cierre ni de apertura. ¡Qué anarquía!.
   Un día de estos fue fiesta pero a mí me da igual, y salí a beber. Y me torturaron vilmente.  Bebí ni se sabe cuantas palabras sin hielo. Y para no emborracharme escuché varios gintonics rápidos con mucho hielo, todos seguidos. Me encerraron psicológicamente en un nuevo/viejísimo bar que se inauguraba esa noche,¡y qué desastre!. Resultó ser un bar ruralmodern, y lo más de lo más era el cerrojo de la puerta del water de caballero. Había gente que se quería como era, pero la decoración no acompañaba, y la música era terrorismo sonoro impuro. Alguien descubrió allí que en su familia  también había alguien más que se quería como era. Por lo menos el ruralmodern-bar  sirvió para algo. Solamente. Hable con alguien que conoció a uno de mis más importantes pasados, pero ese pasado era profundo y este era superficial. Algo no me cuadra. 
    Hoy tocaba ir a  ver teatro a un pueblo cercano, donde corren caballos por las calles. En el patio de butacas había teatreros y puebleras, ¡los públicos!. Podría parecer a priori que la obra no era adecuada  porque llevaba experimentación (bendita sea), pero cuan confundidos estamos a veces con el hecho teatral. 
     Se trataba de "La butaca de nadie" de Kemal Donfhico, teatro dentro del teatro. Una compañía de teatro lleva representando Hamlet durante más dos años seguidos en el mismo teatro. Y desde hace tiempo y en la función de los jueves, los actores   han comprobado que siempre hay una butaca vacía entre el público, siempre es la misma,  con su correspondiente ticket reservado y pagado.    
     Así comienza la función que hemos medio visto esta tarde en el pueblo de los caballos.  Y ha pasado algo realmente curioso en esta casa de cultura, muy teatral, tan improvisadamente teatral que a los actores que representaban la obra no les ha hecho ninguna gracia y han tenido que suspender la función una vez comenzada. Pero yo me lo he pasado en grande. 
      Cuando la obra llevaba unos 10 minutos  de representación real, se produce la escena final  del Hamlet que la compañía representa (teatro dentro del teatro): el Rey Lear muere con su hija Cordelia en los brazos. Final de la obra, saludan, se retiran  y cuando ya se ha marchado todo su público ficticio, salen de nuevo al escenario  quitándose sus ropajes hamletlianos y comentando todos la especial circunstancia  que hoy se ha dado en el patio de butacas. Por fin la butaca vacía, hoy ha estado ocupada. Se preguntan nerviosos y curiosos si alguien ha conseguido ver su cara, sus gestos, algo de la misteriosa persona. Pero apenas había luz y ninguno ha visto claramente de quien se trataba. Pero una de las actrices se acerca al borde del escenario (proscenio) , mira hacia la famosa butaca vacía y se da cuenta que no lo está, porque aún sigue allí sentada la misma persona misteriosa que ha estado durante la representación
     Hasta aquí la obra ha transcurrido con total normalidad por parte de los actores que estaban encima del escenario, pero no así por parte de un actor que debía representar su papel en el patio de butacas, concretamente daba vida a la persona que ocupaba la enigmática butaca vacía. No  ha podido hacer su papel a causa de una espectadora del pueblo,  que se ha negado a levantarse de ese asiento porque ella ha llegado antes  que el actor. 
    La mujer había llegado tarde y al ver esa butaca vacía y se ha sentado sin pensárselo dos veces.  
    Cuando el actor que debía ocupar esa butaca se ha dado cuenta ha intentado por todos los medios aclararla que ese sitio estaba preparado  para él porque iba a representar su papel desde ahí, desde esa butaca. Pero ella (menuda) no se lo ha creído y no le ha dejado el sitio. 
    Ni actores  ni técnicos  se han percatado de lo que estaba pasando y al llegar el momento de descubrir quien era el personaje misterioso que ocupaba la butaca, han encendido los focos dirigidos directamente a ella y en vez de aparecer el actor de la función, ha aparecido una señora de 50 años y 80 kg con los brazos cruzados y muy enfadada. 
     En el texto de la obra la actriz al descubrir que había alguien en la butaca vacía, dice: "¡Está ahí, aún está ahí sentada, miradla!".  Y la mujer, nuestra mujer del pueblo, más tranquila que una vaca en un prado, al oír esto que cree dirigido a ella, ha contestado: "Y no me voy a mover de aquí , porque yo he llegado antes". 
   Al final la función se ha suspendido y yo he visto una de las obras de teatro más cortas y más divertidas de mi vida, algo que no es fácil. 

domingo, 7 de diciembre de 2008

RAMIFICACIONES DE MI PATRIA Y LA REINA DE LA BAÑERA EMBUCHADA






      La expresión "el mundo es un pañuelo" se hizo ayer tal realidad que me asustó. Mi patria es mi infancia (Rilke) y mi patriotismo es recordarla. Uno por tanto siempre está fuera de su patria y sólo vuelve a ella cuando otro patriota aparece y hablan de ella. Pero más que regresar a mi patria lo que se produjo fue una consecuencia de ella. Y las patrias son muy grandes y tienen muchas ramificaciones, y ayer encontré una. Y de la forma más insospechada y en un lugar de apátridas, donde todos aparecen vestidos de carnaval. Y aún no se que pasará. Tengo ligeros recuerdos y vagos deseos. La ramificación la hubiera desechado si la hubiera conocido desde el principio, pero se planteó un juego y entré en él. Y me sedujo porque parecía buen jugador y utilizó muy bien sus cartas, tan bien que me convenció. Y ya veremos. Siento cierto miedo ¿Miedo yo?... Tengo que hacer algo para quitar la rutina  y el aburrimiento de después de las entregas y las sabanas. Los juegos deben durar sólo lo justo sino se deterioran o te afilian. Pero seguiré jugando a la seducción, es cíclico.  Y viva la patria que me parió. 
   América y África  tuvieron un hijo y han regresado a América. Es difícil no estar con alguien que quieres para lo que quiera, es complicado decantarte por el que no tiene razón, y puede ser desgarrador no agarrarte al cuello de quien lo necesita. Vivir a dos es a veces no vivir ni para uno. Convivir nunca convendrá a las partes si hay que igualar, porque no hay semejanza aunque haya amor. ¿Y tú con quien? Ese era en realidad el dilema de Shakespeare. Y en Dinamarca algo sigue oliendo a podrido. 
      Hubo un calendario expuesto como arte y allí fui. Y encontré a tanto expuesto que entre tantos alguno se salvó, de mi quema. Me pulula una sospecha que tendré que abandonar porque intuyo en ella signos de infantividia. También hablé de Roma con uno de los emperadores menoeres, y efectivamente algo sigue oliendo a podrido en Dinamarca y en Roma. Y me reconfortó el menos glam de la fiesta, es autentico, es director y es un gran reconocedor de mis acciones ( mi vanidad de nuevo, pero es que lo necesito joder). Después pensé: algo he hecho, algo queda, algo valió. Y me fui a casa más contento que un ocho triste, tanto que el perro lo notó, dos horas en el parque con él.
  Y luego...(me pierdo en los días vaca-accionales, pierdo la noción de estos días inolvidables dulces y amargos) El caso es que fui a comer a la calle de la canción popular y después un hermoso y depurador paseo-descubrimiento por los altos de la ciudad, los disfruto como un niño, hago bien
   Y hoy, hace nada, a comer buche en un campo mojado donde reina también la hembra, y su real madre, y su rancio padre y su fresco choto colorao (y de-tractor para rematarlo). Y había más, incluido alguien que dio más vanidad (¿más?) portuguesa. ¡Pues to para dentro!, qué lo que no mata estorba. 
   Y comida de luxe, y sin parar y con la mejor de las escenografías: lluvia, ovejas, sol, gallinas, viento, perros, arco iris, vino, barro y postre. (Y pajar con paja. Qué alegría de pecados en familia allá en mi patria) . Y en un momento dado, cuando estábamos zanpándonos las berzas, antes del buche, ¡plof!, la real madre de la hembra se cae en una bañera llena de agua que estaba en mitad del campo. Estaba allí para que los animales bebieran. Y no podía salir de ella (tiene encima algunas carnes).   La bañera con ella dentro, estaba algo alejada de donde comíamos y reíamos ,  y ni nos hemos enterado, nosotros a lo nuestro, a devorar.  Y la pobre anfitriona encajada en una bañera sin poder salir, con el culo mojado y rodeada de animales, domésticos pero animales. Y precisamente ellos, ovejas y perros y gallinas, nos han avisado con sus balidos, ladridos y cacareos, de que algo raro estaba pasando ahí fuera.   Ella, la real,  al ver que nadie acudía en su ayuda, ha optado por una solución practica:  ha continuado comiéndose su plato de berzas que consiguió salvar al desmoronarse dentro del bebedero animal. 
       Los animales han ido acercándose poco a poco  a ella y las berzas que les iba dando. Cuando por fin alguien al querer repetir plato, se percató de que una pieza fundamental del buche no estaba, dijo: Falta alguien ¿no?.  Hemos salido todos en su búsqueda, y allí estaba ella como una reina en su trono, cual Esther Williams metida en el agua y rodeada por una legión de admiradores con plumas, lanas y pelos, que la jaleaban continuamente como si de Cleopatra se tratara mientras se daba sus baños de leche de burra. Allí estaba ella toda espatarrada y feliz como una perdiz...mojada. Al darnos cuenta nos acercamos raudos y preocupados, y ante nuestra inquietud y desasosiego ella sólo ha dicho: "traerme pan que se me ha acabado". 
La vida en el campo es tan.....¿inaudita?.

jueves, 4 de diciembre de 2008

Estar en la resistencia






Llevo 12 horas cabreado. La exigencia de la paciencia.
De 11 a 17h mierda contractual. De 17 a 20h (putos) ensayos del corto. 
De 20 a 22h. teatro con la Compañía Nacional de Teatro Clásico. Durante estas 2 horas no he estado cabreado por la buena dirección. He encontrado en los pasillos a 2 considerados, uno viejo y otro nuevo. En uno pienso más, está siendo una sorpresa confusa. 
 Toda la mañana y parte de la tarde con dos problemas unidos por el dichoso teléfono que se mueve. Me jode y me rejode que no me cojan el exasperado teléfono, aunque yo lo haya hecho. La primera es de esos casos que no matan una mosca (crees) y terminan matando una ballena, de las protegidas encima. No sé si todo estará en mi cabeza, no sé si será para tanto, no sé si será un molino de viento, no sé si serán blancos o negros los fantasmas. Sólo sé que quiero saberlo. Es sólo un cambio de estado ¿Solo?.
  El segundo problema es mucho más enrevesado, pero menos vital-acción, tanto que en el mismo confluyen varios conflictos. Y en medio nosotros, los artibreros.  No quiero tener ahora más tribulaciones, aunque me fortalezcan. No. Me impedirían resistir a gusto.  
Prefiero estar en la resistencia que con la resistencia. 
  En las vaca-acciones todos las temperaturas son hermosas, todas las lluvias bienvenidas, todas las hojas bien caídas, todos los vientos bien soplados, y hasta todos los fríos felizmente disfrutados. Parece una nueva estación.  ¿Y cuando llegue el invierno invierno?. 
    Ayer estaba el tiempo adverso (un día feo) para los demás, y yo con ganas de disfrutarlo.Lo conseguí. Fui al museo de la piel de las ovejas muertas alemanas, donde sólo se habla el fluxus, y su agroviuda.  Es un deleite fluxuar por allí. Es mi circo más querido/divertido. 
     Y allí tuve un reencuentro dichoso, casi inesperado y por eso más dichoso. Tenía que haber ido yo a él, y vino él a mí. En su pública vida le admiro. Ayer (casi) fuera de su privilegio anterior estábamos más cerca. Y sabía que lo haría.  ¿La nostalgia es mala o es depuradora?.
   En este museo de arte y confección contemporánea por obra y gracias de la piel de las  ovejas y de su pastor alemán Vostell, hay obras para jugar al escondite, para ponerte del revés, para ser tele, y otras para sonreír con orgullo. Hay cosa raras, para que nos entendamos. Yo soy raro, para que nos entendamos.  Se llevan a cabo acciones/performances de arte y movimiento, y ayer actuaron para nosotros. 
     Trajeron para ello a 10 mujeres del pueblo de cierta edad. Las vistieron de enfermeras, pero con trajes negros, hasta la cofia era negra. También había 3 burros y un chino (al final me dijeron que era japonés pero que hacia de chino en la acción).  El chino estaba montado en uno de los burros. En los otros dos había una televisión con imágenes de Wall Street en uno, y el otro no cargaba nada pero delante de su cara llevaba una careta de cartón con el rostro de Jacqueline Kennedy . 
     Llegaron en procesión. Primero y en 2 filas iban las 10 enfermeras negras  tocando las castañuelas. Las dos últimas portaban una pancarta que ponía "everything is wel", y a la vez repartían ajos entre todos los que estábamos allí. Después de ellas venía el chino (que era japonés aunque hacia de chino) montado en el burro y pintándose la uñas de rojo. Y cerraban la comitiva los 2 burros restantes. Para que hicieran bien su trabajo les dirigía su dueño, vestido de bombero.
Consiguieron llegar al fondo de la sala. Si situó el chino y su burro en medio y a ambos lados se repartieron por igual enfermeras y burros. (El dueño de los asnos vestido de bombero se quedó entre nosotros) Sonó una canción de Dolly Parton y fueron pasando todas las enfermeras con la mano tendida y pidiendo limosna, delante del chino . Mientras, este iba vertiendo gotas del pintauñas en las manos de las enfermeras. Cuando todas las enfermeras estuvieron colocadas otra vez en su sitio, se paró la canción de Dolly Parton y el chino sacó un megáfono y dijo en voz alta: ¡d'not worry be happy!. 
Entonces entró en escena el dueño de los burros 
vestido de
bombero, se acercó a los dos asnos que no tenían un chino encima y les metió
algo en la boca. Luego  les dio la
vuelta poniéndolos contra la pared, 
con el rabo y el culo para nosotros. Y se retiró. 
Estuvimos 1 minuto
(más o menos) en silencio, y de pronto uno de los burros, el que tenía la
careta de Jacquie  Kennedy,  comenzó a cagar. 
El otro no.

martes, 2 de diciembre de 2008

SOY TAMBIEN LO QUE A VECES NO SOY






No soy sólo una cosa, soy muchas cosas dependiendo de muchas cosas. La autoestima y la vanidad no parecen lo mismo pero se complementan perfectamente. En un estado vaca-accional la vanidad es un remedio casero para curarte de los desechos a los que te conduce el estado. Nunca valoro en igual medida los halagos cuando vienen de desconocidos, nunca echo a volar cuando las alas me las ponen los anónimos, nunca canto victoria cuando la partitura la escriben compositores secretos, pero siempre me gustan los besos de alguien que nunca me ha besado. 
  Si tuviera que edificar mi vida con los ladrillos de los demás, a veces tendría un palacio, otras una zahurda y otras muchas un adosado (los odio estéticamente). Deseo un piropo pero me importa tres pitos, es de usar y tirar. No soy serio. A veces no me sale tan bien disimular -y lo hago muy bien- y notan que uso y tiro con una facilidad pasmosa. Pero como espectador me parece tan grotesco, que no me creo ese papel. ¿Soy también lo que a veces no soy y los demás imaginan que soy?.
  Una entrevista en la contraportada de un periódico no deja de ser un acto más vanidoso que informativo. Tiene todo menos información. Bueno, pues muchas gracias. En realidad creo que es un pago atrasado, por eso la foto la pongo yo. Hay dos respuestas a dos no-preguntas que me han gustado: a los que les importa tanto la reputación en realidad no saben vivir libremente. Y, lo importante es vivir sin parar, ya te parará la muerte. (Miento arriba cuando digo que nunca echo a volar cuando las alas me las ponen los anónimos. Miento). Hay un mensaje político claro que allá en Roma lo han visto, esa era la intención. Y hay una pregunta y una respuesta censurada: PREGUNTA: ¿Qué suelen dejar sus amantes olvidado en su tocador?. RESPUESTA: ¿Me puede repetir la pregunta? Por favor.
   Ayer busqué localizaciones para los interiores del corto de las mentiras en el formal dormitorio del hijo del pintor que también es pintor, y su amada, que también está de vaca-acciones, pero en vez de escribir, jardinea.  En los últimos días he estado en más de 8 dormitorios diferentes con sus correspondientes camas. 
   Y el martes es el Día Nacional del Garbanzo en casa de mi exseñorito, ahora de su doña señora. Nos juntamos todo el séquito garbanzal y ale, a  comer tocino, chorizo, morcilla y mucha lengua. To pa dentro. Y entre sopa y garbanzo, tocino y morcilla, postre y café, parimos. De todo. A veces hasta joyas, oye. Es lo que tiene el Día Nacional del Garbanzo, mucha parida-d. 
   Esta tarde he finalizado un relato sobre un anciano que todos los días mira el tablón de anuncios de las esquelas para ver quien ha muerto, y un día lee su nombre en una de ellas. 
   Antes de terminar el relato, he visitado al enfermo que le gusta ser grafía. Siempre me pongo en su lugar, no lo puedo evitar, y yo acabaría forzadamente rápido. ¿Será verdad que el verdadero amor está aquí, entre tubos y sondas? Creo haberlo visto. 
   A casa de quien ahora está enfermo hemos llevado bombones y libro. Hay cosas genuinamente vulgariginales. Para comprar estas medicinas para enfermos en casa en busca de un riñón/corazón, hemos ido a una de las grandes boutiques de las masas. Glamour y pueblo a rebosar.  Y siempre la misma pregunta al llegar ¿Pero no estábamos en crisis?.  Dentro de este parque temático de la galleta, el zapato y la teleplasma, hemos descubierto en la sección de caballeros y eligiendo calzoncillos a dos hombres grandes tipo conductores-de-furgo-de-reparto-de-material-pesado-para-el-automóvil. No tenía desperdicio la escena. Si es que todo el teatro contemporáneo está aquí, no en las salas alternativas. A mí me entran ganas a veces de llevarme una silla y pasarme toda la tarde de espectador viendo estas performances supersuper que nada tienen que ver con escenas de matrimonio tv. ¡Dónde va a parar!. Aquí hay carne..y pescado, y bollos, y congelados, y alcohol, y yogures, y compresas, y bazar; que es donde tienen lugar las mejores representaciones. Quien va a la sección bazar de un supersuper tiene problemas importantes en su vida, y tensiones, y conflictos. Y donde hay un buen conflicto, hay una buena dramaturgia. Yo la sección bazar la visito mucho por eso. Allí he asistido a representaciones memorables que han condicionado mi afición escénica para el resto de mi vida. 
   Pero la función que he visto hoy en la sección de caballeros, en el apartado de ropa interior, tampoco ha sido moco de pavo. Pongámonos en situación. Dos señores (grandes) de entre 45 y 55 años, decidiéndose o indecidiéndose  por unos slips o calzoncillos. Uno de ellos a veces los denominaba gallumbos.  El más gordo tenía la teoría que para su compañero eran más adecuados los tipo boxer ajustados. ¿La razón? Al trabajar con un mono más bien ancho le convenía más este tipo de prenda porque mantenía apretados y sin bailar a la pirindola y a los pirindolos (literalmente oído y transcrito) . El menos gordo coincidía en parte con el planteamiento inicial de su compañero más gordo. Estaba de acuerdo en que deberían ser unos calzoncillos que mantuvieran la polla y los huevos en su sitio (este no empleaba sinónimos populares, era directamente popular). Pero era más partidario de los slips, argumentando que con ellos sudaba menos. Y además tenía una razón de peso: eran más baratos, había una oferta de tres por 10 euros. Ante esta razón tan actual (crisis) el más gordo contraatacaba con tesis tales como: "lo barato sale caro" y "yo para proteger mis sagradas partes prefiero calidad, aunque me cueste más", "Que hay cosas que uno debe cuidar más, precisamente por ser las que más alegrías te dan, y gratis". El menos gordo parece convencido por este último razonamiento calidad/precio. Fin de la primera parte de "Dos hombres y un calzoncillo". Empieza la segunda: "¿Y me quedaran bien? Yo siempre he utilizado los tipo slips" pregunta el menos grueso.  Contestación del más gordo: "si hombre, si tú tienes una nalgas que lo rellenan todo muy bien, y los boxer estos es lo que tienen, te marcan de puta madre toda la parte que cubren". El menos gordo alucina con lo que su compañero de curro sabe sobre calzoncillos....y culos. Se lo está pensando. Quiere estar totalmente seguro antes de decidirse: "¿Y...me hará un buen culo?". "Maricón, y a mí que me preguntas, si yo no te lo visto nunca" responde sabiamente el gordo. El más flaco se mira su culo sin conseguirlo totalmente y dice. "Ven conmigo al probador y me lo dices". "No se puede probar la ropa interior" le señala inteligentemente el más grueso. "¿Ah no? En Plasencia sí, yo siempre me los pruebo antes de comprarlos". El más gordo está deseando irse y zanja el tema: "Venga tío, que te van a quedar muy bien, estos gallumbos le quedan bien a todo el mundo, y tú tienes buen culo"  le dice mientras le agarra con sus enormes manazas la mitad del trasero al menos gordo, y continua: "venga, vámonos tío, que parecemos dos tías comprando bragas". Pero hay una última cuestión importante que el menos gordo debe resolver: "¿Y de que color los compro?". Y el más gordo que es más listo por gordo que por diablo sentencia el final de la obra con un: "oscuros tío, siempre oscuros, que nunca sabe uno lo que puede pasar. Cógelos oscuros".